Juego e imaginación
POR Adela Miñana
26/10/2022
Maria, de cuatro años estaba realizando una figura de barro y quería poner unos garbanzos y otras semillas en él. Su madre le empezó a explicar que eso era comida que que no lo podía mezclar.
A Maria no le interesa nuestra explicación, poner algo de comida en el barro para ver como queda, es muy creativo y le puede dar un toque diferente. Contener nuestro impulsos es muy beneficioso para que el niño o la niña puedan desarrollar su creatividad al máximo.
La imaginación nos induce a intentar cosas y posiblemente a lograr cosas que nos habiamos propuesto.
Cuando a un niño o niña decimos: «¡ Qué imaginación tiene!, es obvio que lo vemos como algo normal, debido a su corta edad.
Al pasar por las diferentes etapas, sea la de la adolescencia o la etapa adulta, parece ser que la imaginación ya es algo de personas que pueden ser etiquetadas de «vivir en un mundo ideal»
Hoy te contaré como llegar a la etapa adulta con una amplia imaginación y gran creatividad, en la raiz está el «alimento», nuestra «alimento » está en la etapa de cero a seis o siete años aproximadamente.
Imaginarnos el proyecto que queremos conseguir en nuestra mente, hace que lleguemos a nuestro objetivo de una manera más eficaz, ya que los retos comienzan asi, con la imaginación de cada uno.
La imaginación en el juego es la base del desarrollo y le va a ayudar al niño o niña al crecimiento y a relacionarse con el mundo exterior.
El desarrollo de la imaginación y el mundo de la fantasía se desarrolla a partir del mundo de las sensaciones previas, tanto de movimiento corporal como de situaciones que van cambiando para incorporarse a la parte consciente del niño.
Para poder desarrollar su imaginación y para que no se encuentre «dormida» en ningún momento, no precisa juguetes «perfectos», de hecho no los necesita, ya que de esta manera no desarrollaría su creatividad al tenerlo ya todo pensado y hecho.
Con elementos naturales, pueden conseguir un juguete precioso en todos los sentidos, tanto a nivel de creatividad, como a nivel de cero toxicidad.
El juego no sólo opera como nuestro impulso
creativo; es un modo fundamental de
aprendizaje.
David Elkind
El juego es espontáneo, nace del interior del niño y no necesita ser impuesto por ningún adulto.
La espontaneidad es la clave del descubrimiento y sobre todo en los primeros años de vida.
Es un gran don que dura hasta los seis o siete años de vida, si este periodo esta lleno de espontaneidad y de buen ambiente, va a ser una fuente de inspiración para la edad adulta.
Nuestro rol como adulto en la creatividad artística del niño, es de simple observador. Es importante no imponer nuestro criterio, ni que se sienta juzgado.
Algunas actividades que pueden ayudar a los niños de la primera infancia a desarrollar su creatividad son:
- Jugar con el agua. Barreños con agua y lavar la ropa de sus muñecas o cualquier ropa de ellos o ellas mismas
- Explorar la arena y el barro son imprescindibles y por supuesto no hay niños sucios sólo, niños curiosos y exploradores.
- Ensartar con un hilo de colores, cuentas, para hacer collares, pulseras….
Esta semana en la entrevista del espacio EMOTIVA, tenemos a Raquel Ros, psicóloga clínica y terapeuta Gestalt, miembro del Instituto Gestalt de Valencia, que nos hablará sobre el valor del juego y de los juguetes.
Te esperamos.
